Holi! Ya viene Halloween y posiblemente te cortes los dedos intentando hacer caras en las calabazas, así que mejor intenta hacer esta receta que es mucho menos peligrosa y así no tendrás que ir al hospital.
Amamos las cosas dulces el otoño, se nota que el cuerpo pide cada vez menos crudo y cada vez más cremas, pucheros y cosas calentitas. Hace tiempo hice una receta parecida en versión fina pero esta es la versión mejorada, ya verás. Ponte la banda sonora de pesadilla antes de navidad y verás cómo te salen mucho mejor.
- 10 gr de lino molino
- 200 gr de calabaza cocida
- 200 gr de harina de trigo sarraceno
- 100 ml de leche de soja
- 20 gr de crema de cacahuete
- 1 cucharada sopera de levadura
- Un trocito de jengibre
- Un poco de sal
- Aceite de coco para freirlas
Puedes añadirle algo que endulce si quieres, pero tampoco creas que le hace mucha falta. Te recomiendo que metas todo en un robot de cocina o algo que mezcle bien, empieza poniendo la leche y añade el lino en polvo para que no queden grumos, luego añade la calabaza y cuando esté todo bien mezclado, ya puedes poner todo lo demás. Procura que no queden bolitas de nada para que luego no te las tengas que comer.
El siguiente paso es esperar una hora más o menos, si quieres puedes dejarlas hechas la noche anterior y así por la mañana no tienes que quedarte mirando la masa sin hacer nada mientras. Luego simplemente pon un poco de aceite de coco en una sartén que no se pegue, es súper importante tener alguna sartén que no se pegue please 😭 Igual que tener cuchillos que corten ⚡️
La primera que hagas va a quedar fea, no te preocupes porque eso siempre es así, verás que las siguientes van mejorando poco a poco. Yo le puse por encima un poco de caramelo vegano que compré en una tienda y la verdad es que lo petó bastante.
Espero que te guste esta receta y que la envíes por el whatsapp de familia así en modo indirecta para que alguien te la haga. Muak!